Detrás de cada momento vivido en este Año Jubilar parroquial hubo rostros, manos y corazones que se entregaron con generosidad.
Hoy queremos dar gracias a todos los que participaron en la preparación de nuestro 50° aniversario. Por su tiempo, por reconstruir la historia, por tantos talentos y voluntades que se sumaron para animar a la comunidad, organizar y guiar las actividades, y sobre todo por invitarnos a soñar juntos el futuro de nuestra parroquia.
Cada detalle de esta celebración, como la novena, la peregrinación, el jubileo circulante, “el perdonazo”, la Misa aniversario, el compartir y hasta la campana, fueron posible gracias al compromiso de quienes creyeron que este aniversario debía vivirse como una verdadera fiesta de fe.
Queremos destacar también a la comisión organizadora, a los Ministros de la Comunión, al padre Carlos y los diáconos, quienes con dedicación y espíritu de servicio se sumaron a esta misión común: celebrar medio siglo de historia y proyectar muchos más, con esperanza.
Con alegría, te compartimos fotografías de algunos de ellos y que representa a nuestra comunidad que agradece el pasado, celebra el presente y se abre confiada al porvenir, bajo el amparo de Santa María.