Familia Educadora 2
Jueves 03 de Febrero, 2022
Les recordamos que durante este verano, Javier nos irá invitando a meditar sobre la carta del papa Francisco a los esposos:
Las tres semanas anteriores hemos compartido reflexiones sobre la carta a las familias “Año Amoris Laetitia”, en la cual el papa nos invita a experimentar la alegría del amor en la familia. Después de reflexionar sobre la actitud de disponibilidad ante la voluntad de Dios y sobre el rol educador de la familia, ahora Francisco nos invita a descubrir el rol de la familia en la acción pastoral de la Iglesia.
“Por tanto, los exhorto, queridos esposos, a participar en la Iglesia, especialmente en la pastoral familiar”, nos dice el Papa. En mi opinión, esta invitación tiene una doble perspectiva:
Por un lado, se destaca el aporte que la familia está llamada a dar dentro de nuestra comunidad eclesial, como testimonio de amor. La comunidad familiar es imagen del amor de Dios: un amor incondicional, gratuito, que no busca nada a cambio. El que todos los miembros de la comunidad eclesial convivan con familias sanas, promueve la cultura comunitaria y del encuentro en toda la Iglesia.
Pero también ayudando a tender puentes entre generaciones. Para muchos jóvenes que no tienen experiencia de fe en sus familias, poder encontrar esa experiencia en sus amigos y en los papás de ellos, será muy enriquecedor. Les ayudará también a creer en el valor de la familia.
Como testimonio personal les puedo contar que he participado en misiones familiares, conformadas por 6 o 7 matrimonios con sus hijos acompañados por otros jóvenes. Es impresionante escuchar al término de la misión testimonios de jóvenes provenientes de familias destruidas que declaran volver a creer en el matrimonio.
La participación en la Iglesia no solo enriquecerá a la comunidad eclesial, sino también a la misma familia. Es importante encontrar el espacio para que quienes compartimos los mismos valores, podamos dialogar sobre cómo enfrentar los desafíos del mundo de hoy.
Propuesta para el diálogo matrimonial
1. Juntarse en un lugar tranquilo.
2. Comenzar poniéndose en presencia del Señor.
3. Después de leer estas líneas, reflexionar:
- ¿Participamos actualmente o hemos participado en alguna comunidad eclesial (parroquia, colegio, movimiento o similar)? ¿En cuál? ¿Qué beneficios ha traído ello para nuestra familia?
- ¿Conocemos alguna familia que participe activamente en la Iglesia? ¿Qué regalo nos concede el Señor a través de ella?
- Si no estamos participando, ¿cómo creemos que podríamos participar?
Algunas opciones que propongo podrían ser:
- Formar comunidades de matrimonios.
- Preparar novios.
- Preparar para el Bautismo.
- Trabajar con jóvenes.
- Colaborar en la liturgia.
- Acompañar a los enfermos o a los que han perdido un ser querido.
Si tienen la inquietud de participar en la Parroquia, no duden en contactarse conmigo al correo jigonzaf@uc.cl
Como familias tenemos un rol importante en la sociedad, ¡no lo olvidemos!
Fuente imagen portada: Revista Tuparenda.
